EDUCATIVAS Y CULTURALES
HOMENAJE MUSICAL EN EL DÍA DEL HIMNO NACIONAL Y DEL COMPOSITOR
Nancy Donoso |
El evento tuvo lugar el día 10 de mayo a las 18,30 en la sede de la Escuela, ubicada en Baigorria 3169, Villa del Parque.
La ceremonia fue abierta por Susana Luquet, quien agradeció la presencia de las autoridades comunales, comuneras Fabiana Satriano y Antonella Guzzini, la gerente del área de Atención Ciudadana y Participación, Lucía Olivera Sanz, el presidente de la Junta de Estudios de Villa del Parque, señor Francisco Grillo; el Supervisor de Música del Distrito 17, Profesor Guillermo Carro y a todos los miembros de la comunidad escolar presentes.
A continuación, la escritora, dramaturga y directora de teatro Nancy Donoso ofreció unas palabras alusivas a este día histórico. Así, hizo referencia a la creación del Himno Nacional Argentino, que obtuvo su reconocimiento oficial el 11 de mayo de 1813 por parte de la Asamblea Constituyente. Destacó que aquella versión original, que se llamó Marcha Patriótica, distaba mucho de la versión actual de nuestro himno, tanto en extensión como en contenido, ya que tenía muchas más estrofas y entonarla llevaba más o menos 20 minutos, a diferencia del himno que cantamos en nuestros días que solo dura 3 minutos.
Luego, Donoso recitó las estrofas de la antigua marcha, que reflejaban el espíritu de los hombres y mujeres que apostaron a la formación de nuestra nación por aquellos días:
Oid, ¡mortales!, el grito sagrado:
¡Libertad, libertad, libertad!
¡Oíd el ruido de rotas cadenas:
Ved el trono a la noble igualdad!
Se levanta a la faz de la tierra
Una nueva y gloriosa Nación:
Coronada su sien de laureles
Y a su planta rendido un león.
Sean eternos los laureles
que supimos conseguir:
coronados de gloria vivamos
o juremos con gloria morir.
De los nuevos campeones los rostros
Marte mismo parece animar;
la grandeza se anida en sus pechos,
a su marcha todo hacen temblar.
Se conmueven del Inca las tumbas
Y en sus huesos revive el ardor,
Lo que ve renovando a sus hijos
De la Patria el antiguo esplendor.
Pero sierras y muros se sienten
Retumbar con horrible fragor:
Todo el país se conturba con gritos
De venganza, de guerra y furor.
En los fieros tiranos la envidia
Escupió su pestífera hiel.
Su estandarte sangriento levanta
Provocando a la lid más cruel.
¿No los veis sobre Méjico y Quito
Arrojarse con saña tenaz?
¿Y cuál lloran bañados en sangre
Potosí, Cochabamba y la Paz?
¿No los veis sobre el triste Caracas
Luto y llanto y muerte esparcir?
¿No los veis devorando cual fieras
Todo pueblo que logran rendir?
A vosotros se atreve, Argentinos,
El orgullo del vil invasor;
Vuestros campos ya pisa contando
Tantas glorias hollar vencedor.
Más los bravos que unidos juraron
Su feliz libertad sostener
A esos tigres sedientos de sangre
Fuertes pechos sabrán oponer.
El valiente argentino a las arma
Corre ardiendo con brío y valor:
El clarín de la guerra cual trueno
En los campos del Sud resonó.
Buenos Aires se pone a la frente
De los pueblos de la ínclita Unión
Y con brazos robustos desgarran
Al ibérico altivo león.
San José, San Lorenzo, Suipacha,
Ambas Piedras, Salta y Tucumán,
La colonia y las mismas murallas
Del tirano en la Banda Oriental
Son letreros eternos que dicen:
"Aquí el brazo argentino triunfó".
"Aquí el fiero opresor de la Patria
Su cerviz orgullosa dobló".
La victoria al guerrero argentino
Con sus alas brillantes cubrió.
Y azorado a su vista el tirano
Con infamia a la fuga se dio.
Sus banderas, sus armas se rinden
Por trofeos a la libertad.
Y sobre alas de gloria alza el pueblo
Desde el polo hasta el otro resuena
De la fama el sonoro clarín
Y de América el nombre enseñado,
Les repite, ¡mortales! Oíd:
¡Y su trono dignísimo abrieron
las Provincias Unidas del Sud!
Y los libres del mundo responden
¡Al gran pueblo argentino, salud!
La Profesora Andrea Dongarrá (en piano) junto a la profesora Mariana Marcolongo (en flauta traversa) tocaron el Himno Nacional Argentino que fue entonado por todos los presentes en el auditorio.
El evento continuó con un mini concierto a cargo de profesores y alumnos.
Abrió el segmento con la actuación del conjunto de guitarra encabezado por el profesor Facundo Bianco y sus estudiantes: Alma Pelozo, Juan Sebastián Semoloni y Fiorella Aguirre.
Siguió el profesor Pablo Marchettich con su discípulo, interpretando una reconocida composición perteneciente al método suzuki para violín.
Y finalmente hubo tres temas en flauta traversa interpretados por la profesora Mariana Marcolongo, acompañada por Diego González Paussaud y Maira Cueto.
En este sentido destacó la presencia de Heather, mamá de Malcolm Lagger Caldwell quien compartió la historia de cómo su hijo descubrió su pasión musical en la Escuela de Música Nº3. Malcolm se convirtió en un destacado compositor y músico, graduándose del Conservatorio Superior de Música Manuel De Falla y de la Universidad de Artes de Buenos Aires (UNA). Actualmente forma parte de la Filarmónica de los Países Bajos.
Malcolm Lagger Caldwell De Villa del Parque a la Filarmónica de los Países Bajos |
En un anterior viaje que Malcolm hizo a nuestro país, ofreció un concierto solista de bandoneón en el CCK. En esa oportunidad la crítica dijo… “¡Un músico creativo, genuino y detallista con ganas de trabajar y dispuesto a afrontar desafíos! Malcolm tiene toda una vida de conocimiento y educación musical que se refleja en su música. La entrega de su trabajo es minuciosa y rápida, brindando un servicio amigable y receptivo. Brillante compositor e intérprete.”
Para dar una mirada más completa de cómo es la vida de un compositor, el Profesor Gastón Verea, director de orquesta de la escuela compartió sus experiencias: “empecé componiendo de muy chico. El primer tema lo hice a los 13 años y ahí descubrí mi vocación. Después me metí en el conservatorio”. Y continuó explicando cómo es el proceso creativo… “Siempre se parte de alguna idea musical, de una melodía, de un ritmo. Yo ahora compongo música sinfónica pero para lograrlo tuve que estudiar mucho (…) Partí de obritas para guitarra que es el instrumento inicial, luego compuse para dos instrumentos, después para tres y así llegué a hacer música sinfónica”. Además enfatizó en que el trabajo del compositor “es una tarea muy solitaria. A veces uno llega a la noche y las ideas no salieron durante el día. Y cuando estás a punto de dormirte aparece eso que estabas esperando… lo escribís en un papelito... seguís durmiendo… y al otro día continuás. Quiero destacar que este es un oficio, en el sentido del artesano. Si yo dejo una idea quieta durante tres meses, no soy compositor. Este es un trabajo diario”. Verea cerró diciendo “Componer no es nada del otro mundo, hay que estudiar mucho, pero el mensaje más importante es que todos somos capaces de hacerlo. Yo partí a los 13 años haciendo canciones con tres acordes y eso ya es ser compositor”.
Actualmente Verea además de componer música sinfónica, enseña a niños, dirige la orquesta de la Escuela de Música Nº3 D.E. 17 y es miembro de la Asociación Argentina de Compositores.
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