INSTITUCIONALES

ENTREVISTA

BIBLIOTECA RAFAEL OBLIGADO

RESIDENTES MOVILIZADOS PROPONEN TALLERES Y ACTIVIDADES ARTÍSTICAS

En los últimos días, las autoridades del área de bibliotecas del GCBA convocaron a los vecinos a conversar sobre el proyecto presentado.

Los vecinos pretenden que el espacio sea aprovechado íntegramente y no como está ahora con una actividad mínima. Para conocer sus propuestas conversamos con Roxana Amenabar integrante del colectivo “Barrio Nazca” que está llevando adelante estas acciones.

P: Sabemos que la Biblioteca Pública Rafael Obligado reabrió sus puertas el 26 de junio -después de estar tres años cerrada- brindando un servicio de préstamo y devolución de libros. ¿Cómo encontraron los vecinos al espacio?

R: Es así, en junio la “biblio” reabrió teniendo habilitada solo la sala de planta baja. Previo a ello, el Ministerio de Cultura de la Ciudad dio una pintadita y así volvieron a atender sin siquiera acomodar los libros y sin traer nuevos volúmenes.

Por eso, desde ese día hasta la actualidad, la actividad es mínima, te diría casi nula.

P: ¿Cómo está estructuralmente la biblioteca?

R: Es una construcción muy sólida de dos plantas, que responde al mismo estilo arquitectónico de las casitas del barrio Nazca, cuenta con una sala en planta baja y otra en primer piso, además de un precioso patio y tres baños.

Sin embargo, producto del tiempo y de la falta de mantenimiento fue sufriendo un marcado deterioro. Antes que comenzara la pandemia ya tenía problemas en los techos y cada vez que llovía el primer piso se inundaba y acumulaba un promedio de dos o tres centímetros de agua en toda la planta.

Este año, después que la abrieron parcialmente para la entrega de libros, el Ministerio de Cultura inició una serie de trabajos. Arreglaron los techos, están terminando de reparar una pared, pusieron split frío-calor, repusieron el servicio de internet con wi-fi y ahora estaban por comenzar a arreglar los cielorrasos de la primer planta que se dañaron por las filtraciones.

Nos habían prometido que iban a hacer un gran acto inaugural el 4 de septiembre, fecha que coincidía con el aniversario de la biblioteca, pero ello no sucedió y estimo que es porque no han podido concluir los trabajos de refacción.

También faltan luminarias en el frente y está pendiente que nos autoricen a pintar un mural en la fachada.

P: ¿Ustedes pudieron tener reuniones con autoridades?

R: Sí, tuvimos un encuentro en la sede de la biblioteca con Sol Battini, gerenta operativa de promoción del libro y bibliotecas; Lucila Berner, Gerenta Operativa de Infraestructrua Cultural, y Melina Trlik, coordinadora de las Bibliotecas Públicas donde les presentamos todas nuestras propuestas y se comprometieron a evaluarlas.

Nuestro colectivo es consciente que así como está, con los escasos servicios que brinda, con los volúmenes desactualizados que tiene, la "biblio" no va a funcionar.

Por eso ideamos una serie de talleres que podrían darse en forma sucesiva que creemos que atraería a más interesados a participar, le daría vida al espacio y cumpliría verdaderamente su función social. También sería interesante que vuelva el servicio de apoyo escolar primario y secundario, como así también la visita de los colegios para que los chicos conozcan la biblioteca y compartan actividades literarias.

Los vecinos celebraron el
aniversario de la biblioteca, a
pesar que no hubo acto oficial

P: ¿Cómo surgió la iniciativa de hacer talleres?

R: Nosotros vemos que dentro de la red de bibliotecas públicas, que integran 31 entidades de este tipo distribuidas en los distintos barrios, hay cuatro o cinco que tienen una programación súper atractiva y dinámica: con talleres de todo tipo, cine-debates, exposiciones, charlas y clases vinculadas al ámbito literario y de la escritura. Es una lástima que este tipo de propuestas no puedan estar al alcance de los vecinos de nuestro barrio y optimizar el uso de un espacio con tanto potencial que hoy está totalmente desaprovechado.

P: ¿Ustedes propusieron los talleres?

R: Sí, en principio armamos un formulario digital para que los artistas, artesanos y todo aquel que desee dar charlas o cursos breves, pueda anotarse. Recibimos más de 20 propuestas que fueron elevadas al ministerio. En todos los casos serían actividades gratuitas y de corta duración (no más de tres o cuatro clases).

P: ¿Qué les respondieron?

R: Que las están evaluando y hace unos días nos convocaron a una reunión para que abordemos estas propuestas, así que estamos con muchas expectativas. Nosotros no vamos a bajar la guardia hasta tanto le den a este lugar el rol que verdaderamente merece y que justifique que esté abierto.

P: Saben cómo está funcionando el resto de la red de bibliotecas?

R: Como te decía antes, tenemos conocimiento que algunas bibliotecas de la red, como consta en la cuenta de Instagram @bibliotecasba, tienen una profusa agenda cultural. En ellas se desarrollan interesantísimos talleres, cine-debate, charlas y clases vinculadas con la escritura y la lectura. A nosotros nos encantaría que actividades similares tengan lugar en nuestra bibliotecas y por ello pusimos manos a la obra y no nos vamos a resignar.

También sabemos que al igual que pasó con la biblioteca Rafael Obligado, hay otros cuatro o cinco edificios más que no fueron reabiertos. Algunos de ellos están en pésimas condiciones.

DE LA CLAUSURA A LA REAPERTURA…

Luego de estar cerrada durante tres años, la Biblioteca Pública Rafael Obligado volvió a abrir sus puertas el 26 junio de 2023, según le comunicó a este medio Rocío López Natasi, del equipo de prensa del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Recordemos que fue el inicio de la cuarentena, aquel 20 de marzo de 2020 la causa del cierre.

El tiempo pasó y a medida que iban disminuyendo las restricciones y reabrían todas las oficinas públicas, la biblioteca siguió permaneciendo cerrada.

Esto motivó un primer llamado de alerta por parte de los vecinos del Barrio Nazca (Villa Santa Rita), cuyo primer paso fue corroborar la razón por la que la biblioteca no se había vuelto a abrir. Para este cometido elevaron notas a la comuna y a la Dirección general correspondiente.

Viendo que no había respuestas a la vista, este año la inquietud se transformó en movilización. Los residentes comenzaron a organizarse juntando firmas, visibilizando lo que estaba sucediendo a través de redes sociales y generando actividades artísticas frente a la sede, ubicada en el pasaje Crainqueville 2233 (a dos cuadras de las avenidas Nazca y Jonte).

Finalmente, la biblioteca se reabrió parcialmente sólo para préstamos de libros a la par que se iniciaron obras de restauración en el primer piso del edificio.

Al abrirse la biblioteca comenzó un canal de diálogo entre el grupo de residentes organizados y los responsables del área de bibliotecas de la ciudad. La intención es que el espacio sea mejor aprovechado y se convierta en una especie de casa de la cultura donde se impartan propuestas educativas, culturales y artísticas.

¿Cómo te podés asociar?

Ingresando a https://buenosaires.gob.ar/cultura/bibliotecas-publicas-de-la-ciudad

2- Una vez que te llega la confirmación por mail, podés acercarte a la biblioteca en el Pasaje Crainqueville 2233 (a dos cuadras de Jonte y Nazca) de lunes a viernes de 10 a 17 hs para pedir un libro. El préstamo es por 30 días.