COMUNA 11

VILLA DEVOTO

LANZAMIENTO DEL DISTRITO DEL VINO

Un acto de bajo perfil.
Vecinos se acercaron a entregarle al Jefe de Gobierno su reclamo para que se modifique la ley. No quieren que el polígono recaiga sobre áreas residenciales y afecte su calidad de vida.

En un muy discreto acto presidido por el Jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador de la Provincia de Mendoza, Rodolfo Suárez, se realizó el lanzamiento del distrito del vino y lo que ahora se da en llamar kilómetro 0.

Plantación de una parra en la plaza Arenales

En la muy breve recorrida por la plaza Arenales donde se plantó un ejemplar de parra, el Jefe de Gobierno fue interceptado por un grupo de vecinos que en representación de su colectivo le hicieron llegar una carta solicitando una entrevista con el mandatario porque entienden que es perentoria una modificación de la ley que establece el distrito del vino sobre áreas netamente residenciales. Interpretan además que el procedimiento con el que se llevó a cabo la sanción de esta normativa no fue la que hubiese correspondido para una política que va a tener un significativo impacto sobre el territorio y tienen la convicción que tal y como está planteado el polígono del distrito del vino “es un atropello a su calidad de vida, con el agravante que no fuimos consultados en ninguna de las instancias locales de la vida democrática habilitadas por la Constitución y las leyes que imperan en la ciudad”, comentó una de las señoras presentes a este medio.

En la misiva le expresan a Horacio Rodríguez Larreta: “Contamos en ser escuchados por usted como ocurrió en otras oportunidades, con el propósito que nos conceda una reunión para poder presentarle nuestra propuesta. Es menester tener una charla en busca de contar con su aval a nuestro reclamo, en cuanto a la pretendida modificación de la ley a la brevedad posible.”

Luego la comitiva oficial siguió rápidamente su camino a un ámbito cerrado, lejos de los vecinos, donde concluyeron el lanzamiento con algunos medios de comunicación.

Recordemos que este nuevo distrito del vino beneficiará impositivamente a las empresas que realicen inversiones vinculadas con el sector dentro del área demarcada (conformada por las calles Espinosa, Biarritz, Av. San Martín, Carlos Antonio López, Av. General Paz, Cervantes, Tinogasta, Emilio Lamarca, Ricardo Gutiérrez, Alfredo Bufano y Terrero) como ser producción y distribución de vinos, depósitos, bodegas, cavas, centros de enseñanza, formación y capacitación del producto, vinotecas, bares, restaurantes y emprendimientos gastronómicos que pivoten en el consumo de este producto. También prevé establecer un museo del vino en algunas de las viejas bodegas o locales en desuso sobre Av. San Martín y podría ser en el edificio de FECOVITA y volcar para uso de este distrito al majestuoso Palacio Ceci emplazado en el corazón de Villa Devoto.

Las primeras quince firmas anotadas en el registro que se abrirá para tal fin computarán como pago a cuenta del impuesto sobre los Ingresos Brutos hasta el 70% del monto invertido en el desarrollo inmobiliario dentro del distrito y los siguientes el 50%. El Banco Ciudad extenderá créditos tanto para la construcción, compra, alquiler, mejora y acondicionamiento de inmuebles dentro del polígono, como para la adquisición de equipamiento relacionado con actividades ligadas al vino.

¿Qué temen los vecinos que viven en áreas residenciales alejadas hasta ahora de zonas comerciales?

Cuando miran el mapa sobre el que está trazado el distrito perciben que el 80% del área que abarca son manzanas netamente residenciales de Villa Devoto y una parte de Villa del Parque, con un valor de la tierra que está entre los más altos de la ciudad.

Perciben que el mayor riesgo es que se genere una “invasión” de empresas -que estarán habilitadas para la fabricación, logística y distribución, centros de formación, oficinas, cavas, bares y restaurantes- , y lleve a un acelerado proceso de gentrificación, donde el vecino tenga que “huir” (aún malvendiendo su propiedad) porque el bucólico “jardín de Buenos Aires” pase aceleradamente a ser historia frente a la abrumadora llegada de olas de visitantes, mayor densidad de población, embotellamientos de tránsito, ruidos molestos e invasión del espacio público (algo que además ya se está viviendo y genera conflictos de convivencia en ciertas áreas de la comuna 11).