INSTITUCIONALES

INSTITUTO EVANGÉLICO AMERICANO

TRABAJOS ESPECIALES DE COMUNICACIÓN:

EL ARTE EXPRESA, EMOCIONA Y SANA

En el contexto de pandemia y de cuarentena del año pasado, el Instituto Evangélico Americano convocó a sus estudiantes a expresar sus sentimientos y emociones a través del arte.

Elegimos un texto e ilustración publicados en la Revista IDEAS.

QUERÍA PARARME A MIRAR EL MUNDO

Escribe: TATIANA SLUSARCZUK, 3º Comunicación “B”

Correr, correr, ni yo se que estoy haciendo, correr, correr, o dónde estoy corriendo.

Infinitas y elocuentes dudas fluyendo en el intervalo de pausa arbitraria de esta cotidianeidad procesada que nos mantiene estáticos simulando un obrar.

Alto. El mundo proclamó y mostró la realidad desconocida que vivíamos sin mirar. ¿Vivimos alguna vez? ¿Resulta este stand-by en más movimientos que la carrera corriente?

Creía pararme a mirar el mundo, más un día él se paró a mirarme a mí. Temo. Temeos. Cara a cara con una realidad, nuestra, distante por excelencia inconsciente, eco de una percepción casi perdida.

Mirada a mirada sin saber cómo aceptarla, Afrontando que aún no experimentamos el existir.

Quejas anteriores recuerdan haber sido gritos de alegría, a la hora de pensar en un cambiar.

Es el hoy del mañana y habitamos en un decir monomaníaco, de interés capcioso. Es el hoy del mañana y seguimos caminando en el ayer.

Aprender a hacer a la par del observar. Aprender dónde se está sin necesitar el lugar. Una vez entendido cómo accionar sin precipitar el movimiento, la razón permitirá el retorno a aquel momento que sí habíamos sabido observar, en que habíamos comprendido estar.

Aprender a abrazarnos, reinventado el sentir.

Ensayos del vivir.