INSTITUCIONALES

CENTENARIO

INSTITUTO EVANGÉLICO AMERICANO

1920 - 1º DE JULIO - 2020

“Sus huellas, nuestro camino, tu futuro”

En este año tan particular y difícil que nos toca transitar, el próximo 1º de julio la Congregación El Redentor y el Instituto Evangélico Americano estarán cumpliendo sus primeros cien años de vida y trayectoria.

1920: Primera sede del Instituto Evangélico Americano en la calle
Pedro Lozano 3151 (actualmente Iglesia Santa Ana y San Joaquín)

La obra evangelizadora de la Iglesia Luterana en Villa del Parque comenzó en el año 1910. Hacia 1912 se ofició el primer bautismo de la niña Margaret Hedvig Hessling, cuya familia residía en la calle Argerich 3674. En 1919 se funda el Centro Social de Jóvenes Evangélicos de Villa del Parque.

La Congregación El Redentor de Villa del Parque fue organizada en forma definitiva por el Reverendo Dr. Eduardo H. Müller (1875-1923) y se convirtió en la primer iglesia luterana de habla hispana de Sudamérica – la Iglesia Evangélica Luterana Unida.

La primera capilla fue construida en los “altos de la calle Nazarre y Cuenca”. Más tarde se construyó una capilla de madera en el terreno de Pedro Lozano 3151 (donde hoy está la Parroquia Santa Ana y San Joaquín). En ese mismo solar, el 1º de Julio de 1920 se funda el Instituto Evangélico Americano en Villa del Parque bajo los auspicios de la I.E.C.L.U., siendo presidente de la obra el mismo pastor Dr, Müller.

Inicialmente la escuela comenzó a funcionar como Jardín de Infantes con la inscripción de apenas doce alumnos y una profesora especial. Pero el crecimiento fue vertiginoso y para Mayo del año siguiente funcionaban los tres primeros grados de la escuela elemental con 91 alumnos y tenía la adscripción en el Consejo Nacional de Educación. Dos años más tarde se abre el internado con cuatro pupilos y se da comienzo al Ciclo Comercial Secundario.

Al vencerse el contrato del predio alquilado en la calle Pedro Lozano (1922), el dueño decide venderlo a la Iglesia Católica y es en ese momento donde el Dr. Müller adquire los terrenos ubicados en Simbrón y Cuenca, aproximadamente un cuarto de manzana, más tarde se adquirirían otros sobre lo que hoy es la arteria principal del centro comercial del barrio. El 6 de mayo de 1923, ceremonia mediante, se coloca la piedra fundamental de lo que muy pronto sería el primer templo luterano de habla hispana de Sudamérica.

Desafortunadamente el Reverendo Dr. Müller falleció muy poco tiempo después, el 22 de Noviembre de 1923, pero su huella marcaría la continuación de una obra fecunda que continúa hasta el día de hoy.

1930: Se observa sobre Simbrón, el colegio, la casa
pastoral y el Templo

En 1924 se creó la Universidad Popular y se inauguró el nuevo edificio en Simbrón 3160.

A partir de 1930 el I.E.A. mantiene y desarrolla las secciones preescolar, primaria (1º a 7º grado), Secundaria (1º a 5º año), biblioteca popular. Secundaria Comercial (1º a 3º), Universidad popular, el internado (pupilos y medio pupilos) y un área deportiva de uso extensivo.

Hacia 1942 se abre el Liceo de Señoritas.

Por causas que desconocemos, en 1951 el instituto dejó de tener escuela secundaria y es recién en 1970 cuando reabre el nivel medio, primero el bachillerato y un año más tarde, Comercial.

Imagen de la escuela en 2004

Otros pastores que guiaron a la Congregación y marcaron su impronta a lo largo de las décadas, fueron Juan M. Armbruster, el pastor Juan Cobrda, el pastor Ricardo Pietrantonio y por supuesto la Pastora Juana Corigliano, recientemente jubilada.

Juan Cobrda escribía en un editorial, a propósito de celebrarse el 60º aniversario de la escuela… “Esta obra religioso-educativa nació con Villa del Parque y por sentirse parte de este barrio, determinó sus actividades de acuerdo con las necesidades de la sociedad que la rodea” y agregaba… “Sesenta años dan testimonio de nuestro compromiso con este proceso de formación y de crecimiento de nuestra “villa”, así como los miles de alumnos que pasaron por nuestras aulas y los numerosos profesores y maestros”.

Todo este largo camino de predicar la fe y promover la educación integral hoy encuentra su síntesis en el lema que esta institución ha elegido para celebrar sus primeros cien años de vida: “Sus huellas, nuestro camino, tu futuro”.