EDUCACIÓN

LA OPINIÓN DE ESPECIALISTAS

Dando una mano...¿QUÉ ROL CUMPLE EL ACDM EN LA ESCUELA?

Escribe: WALTER OROÑO (*)

En el marco de las políticas educativas de integración se crea en 1993 el cargo de Asistente Celador para niños con discapacidad motora en los distintos niveles de enseñanza. El asistente celador con su intervención, contribuirá a facilitar, desde su función específica, la integración de los alumnos con discapacidad motora ayudando a su participación en las actividades áulicas e institucionales.

Su propósito, es acompañar a los niños/as, adolescentes y jóvenes con dis-capacidad motora en los distintos niveles y modalidades de la Educación (Inicial, Especial, Primaria y Media y Terciaria), facilitando la integración de los alumnos, ayudándolos en la participación de actividades áulicas e institucionales y asistiéndolos en las prácticas de higiene y alimentación. 

Su misión y principales funciones son: 

- Acompañar a los alumnos asignados en los traslados dentro de la escuela con el objeto de contribuir a la integración escolar y facilitar su participación en actividades lúdicas, recreativas, deportivas, de autovalimiento y pedagógicas.

El ACDM acompañará a el/los alumno/s asignados en el ingreso y egreso de la escuela, siempre que estos se realicen dentro del horario de la jornada que estipula el reglamento escolar para dicha institución.

El Asistente Celador Informará de inmediato las barreras arquitectónicas que impiden el normal desplazamiento del alumno/a, con el objeto de remediarlas, o crear dispositivos alternativos para remediarlas.

El AC ayudará en las prácticas de higiene y alimentación de los niños asignados, en caso que lo requiera, favoreciendo en todo momento (dentro y fuera del salón) los hábitos que promuevan el autovalimiento y la independencia. En los casos de alumnos que deban ser higienizados por un AC, el adulto a cargo deberá autorizarlo por escrito.

Además, los ACDM acompañarán a los/as niños/as a las experiencias directas (salidas didácticas) y los programas de Natación organizados por la escuela.

En síntesis:

El sentido específico del rol del ACDM, su “para qué”, queda expresado básicamente a través de dos objetivos, vinculados con la integración y el autovalimiento.

1. Facilitar la integración al contexto escolar, de los alumnos y alumnas con discapacidad motora, cualquiera sea el nivel y/o modalidad educativa que les corresponda.

2. La integración de los alumnos al contexto escolar, en el marco de una educación inclusiva, alude a la tarea conjunta que institucionalmente se requiere para consolidarla. Lograrlo, supone la construcción de un dispositivo escolar que de respuesta a las diferencias.

Dentro del dispositivo escuela, el/la ACDM, es uno de los agentes educativos que lo constituyen.

3. Promover el autovalimiento y la independencia en las interacciones que alumnos y alumnos establezcan respecto del entorno y/o respecto de sus propios requerimientos

Este objetivo deja planteado el rol educativo y la función de “enseñantes” que les compete a los Asistentes.

Se asume que, el autovalimiento y la independencia se aprenden y se construyen.

Requieren por lo tanto, la intervención intencional y activa por parte de quiénes tienen a su cargo la asistencia de las funciones específicas, antes mencionadas: motricidad fina y gruesa, higiene, alimentación.

(*) Walter Oroño es licenciado en psicología de la Universidad de Buenos Aires y posee certificación pedagógica para nivel primario y medio, otorgado por el IES “Juan B. Justo”. Actualmente se encuentra promediando la carrera de profesorado de educación primaria en el IEA “Juan B. Justo” y el profesorado de psicología de la UBA. Se desempeña como maestro psicólogo en la EII Nº4 DE4 de la C.A.B.A.